sábado, 31 de diciembre de 2011

Nochevieja


—Ezta noshevieha me voy de madsheta.
—Me alegro.
—Gasiaz. ¿Tú no?
—No, yo me quedo en casita y tan a gusto.
—No m’ezpedaba menoz de ti.
 —¿Y dónde vas?
—A una macofiezta.
—¡Uy, que moderno!
—Ez que yo zoy y eztoy hoven.
—Pues ten cuidado con el garrafón.
—No queo que me topiese, ez al aide libe. Zi acazo tendé cuidao con el ozo.

(No entendí lo del oso, pero pensé que podía ser una bebida).

—¿Cuánto te ha costado? Porque a veces se pasan un pelo esa noche.
—Nada.
—¿Qué raro? ¿Te ha invitado alguien?
—No.
—Pues nadie regala nada hoy en día.
—A vesez loz Deyez zí. Zi edez bueno todo el año. Y también ayudan a que uddan guadinez.
—¿Urdan guadines? ¿Qué es urdir guadines?
—Guadinez no. Con ede, no con de.
—Me da igual, ¿qué es un guarín?
—Un guadín ez el último seddito que nashe en una camada.
—No te entiendo, pero es igual. Y la camada de una cerda se llama lechigada —le corregí.
—Yaztamoz, el codedtod lingüizta en línea.
—Venga, vale. ¿Dónde es la macrofiesta esa?
—En Zol.
—¿Y dónde hay en la Puerta del Sol un recinto al aire libre para macrofiestas?
El del 31-d
—Anda, ézte. En la mizma plasa. Voy a padtisipá en el teinta y uno de, como no eztuve el quinse eme. Y de pazo selebamoz con el Tío Pepe zu último año, queo. Qué idonia, una mansana McIntozh amedicana que ze bebe un fino ezpañol. Me padese que noz quedamoz zin guitada, zin zombedo coddobez y sin guayabeda doja.
—Sí, González Byass pasará a ser Gonsalez Byess. Pero, a ver, a ver. Macrofiesta, al aire libre, el oso, nochevieja, gratis... Tú vas a tomar las uvas a la Puerta del Sol.
—No, Ede Se A va después. Pimedo seno aquí, me tomo laz uvaz contigo y luego me laz pido vampido —me aclaró Erre C. A. frotándose las manos.
—Ya me extrañaba a mí...
—Puez no tiene podqué. Si fueda al debéz zí zedía eztaño.
—¿El qué, que te quedaras?
—No, que zaliedaz tú. Edez el dey del bozteso, tío.






Imágenes bajadas de  www.cadenaser.com

viernes, 30 de diciembre de 2011

Palabras con vocación impropia (62ª)


Sexagésima segunda entrega. Otra vez la A.

..............................................................
agarrón. m. Acción de agarrar y tirar con fuerza.
agarrón. (De hacer, y ron). m. Destilador o/y fermentador de caña de azucar.
ej.: Bacardí tiene muy buenos agarrones.
Aguilando
…………………………………………………
aguilando. (Quizá del lat. hoc in anno, en este año). m. aguinaldo (‖ regalo navideño).
aguilando. (De águiña). Andar cazando cual águila.
ej.: ¡Cuidado! Hay mucha gente aguilando.
..............................................................
agujal. m. Agujero que queda en las paredes al sacar las agujas de los tapiales.
agujal. (De aguja). m. Terreno sembrado de agujas.
ej.: Después de coser, mi sofá parecía un agujal.
..............................................................
almacabra. (Del ár. hisp. almaqbyára y este del ár clás. maqbarah). m.
Antiguo cementerio de moros.  
almacabra. (De alma y cabra). f. Sustancia espiritual que tiende al monte.
ej.: Déjale que se vaya, ése tiene almacabra.
..............................................................
alzapuertas. (De alzar y puerta). m. desus. Actor que solo sirve de criado o comparsa en las comedias.
alzapuertas. (De alzar y puerta). m. Arandelas que se introducen en los espárragos de las bisagras para que la puerta no roce con el parqué.
ej.: He puesto alzapuertas y ahora roza arriba.
..............................................................
Amacollares
amacollar. intr. Dicho de una planta: Formar macolla. U. t. c. prnl.
amacollar. (De amar y collar). f. Mujer que gusta de exhibir joyas y en especial de colgarse collares del cuello. U. t. en pl. con el mismo significado que en sing.
ej.: Doña Carmen Polo fue una amacollares acérrima.
.............................................................
anádromo. (Del gr.  άναδρóμος). adj. Zool. Se dice de las especies de peces que viven en el mar, pero remontan los ríos para reproducirse, como el salmón. U. t. c. s.
anádromo. (De Ana y el gr. δρóμος, carrera). m. Terreno especialmente preparado para las carreras de mujeres llamadas Ana.
ej.: En Madrid, pronto vamos a necesitar un anádromo para la Botella.
.............................................................. 
Analgésico
analgésico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la analgesia. […].
analgésico, ca. (De ano y el gr. λγος-ους, dolor). adj. Medicamento que actúa sobre el dolor de ano.
ej.: Uso mucho analgésico para no sufrir tanto en silencio.
..............................................................
andanada. (De andana). f. Descarga cerrada de toda una andana o batería de cualquiera de los dos costados de un buque. […].
andanada. (De andar y nada). adj. Vago en el andar, antónimo de andarín.
ej.: Después del accidente me he hecho un andanada.
..............................................................
anglófono, na. (Del fr. anglophone). adj. Dicho de una persona o de un país: Que tiene el inglés como lengua nativa.
anglófono. (De ánglico y -fono). m. Instrumento que reproduce solamente las vibraciones de las voces inglesas.
ej.: La primera vez que escuché a los Beatles fue en un anglófono.
..............................................................

Imágenes:  (1ª) www.lanaveva.wordpress.com (2ª) www.blogdeheraldica.blogspot.com y (3ª) www.forocule.foroactivo.com

jueves, 29 de diciembre de 2011

Aprendiendo inglés


El vago estudioso

—H’empesado a eztudiá ingléz.
—Pues a ver si lo acabas.
—¿Lo dudaz?
—No, estoy seguro de que lo vas a dejar a medias. Pero todavía no ha llegado el año nuevo. Los fascículos y los cursos se publicitan después de los perfumes.
—Yo no zoy Visente.
—No, ni siquiera gente.
—¿Y tú te queez diztinto?
—No y sí.
—Bueno, al menoz lo tienez clado —fue el cometario irónico de Erre C. A.
—Sí, no como tú.
—Clado, clado. Aquí ziempe ez Ede Se A el tontodón…
—No. ¿Pero qué pasó con el chino?
—Que me di cuenta que pada compad tontediaz badataz no nesezitaba sabé el idioma de Confusio.
—¿Y qué pasa, que en la panadería te hablan en el de Shakespeare?
—No, pedo zi quiedo leé el Timez o el Guaddian podé hasedlo.
—Como estamos suscritos… —ahora fui yo el irónico.
—Zi en ezta caza ze dedicadan máz decudzoz a la enzeñansa… —se quejó el rano.
—Uebos nos es.
—¡Hala! Luego disez.
—Estos son sin hache y con be.
—O zea, que ze tata d’ezquibí mal laz palabotaz, ¿no?
—No. Se trata de conocer tu idioma.
—Poz no hay coza que máz me goda, con he de goddo, que quelloz que ze quieden hasé loz liztoz.
—No busques subterfugios y habla bien, que aprovechas cualquier resquicio, te pareces a Carlitos.
—Anda que tú. Lo que paza ez que no cabez pod elloz y ze te ve el plumedo.
—Hablando de plumeros…
—Ah, no. Tengo claze en el Bitizh Counsil Kidz, lo ziento.
—Pues cuando vuelvas.
—No, podque me ponen tadea.
—Pues cuando acabes la tarea.
—No, podque tengo que pepadá la claze de mañana.
—¿Y qué pasaría si me matriculara yo en tu curso?
—No puedez, tú no edez un kid.
—Y tú eres un flog.
—Mida quien fue a hablá, un mandoble —se desquitó Erre C. A. abarcando la nada con sus brazos e inflando los carrillos.

miércoles, 28 de diciembre de 2011

El experimento


Para  Juan Carlos


—Voy a hacer un experimento gastronómico.
—¿A quién vaz a mandá a la luna? ¿A mí no, veddá?
—Con ge, ggggastronómico; no astronómico —corregí a Erre C. A.
—Me lo ezplique, pod favó.
—Es muy sencillo: cocido con carne de rana.
—¿Y pod qué no lo hasez con cadne de seddo?
—Porque el cocinero no puede estar dentro del puchero. Que sé por donde vas.
—Entonsez hoy como fueda. Pod zi acazo.
El coho mantecaz
—No, hombre. Quédate. Si sólo voy a echar un anca. Es una prueba.
—Zí, pod lo que le faltaba a Ede Se A. Ensima coho.
—Tío, si eres de trapo. Yo, al puchero, no le echo telas, y menos pingajos.
—Ez veddá. A vesez ze me olvida. Sedá pada no zentidme difedente o ezpesial.
—Un poco especialito sí que eres.
—Pedo en oto zentido. No zabé a qué gupo pedtenesez ez algo que me dezconsiedta.
—Tú perteneces al grupo de la Fantasía. Un subgrupo que descubrió Michael Ende*, pero que ha existido siempre.
—Zedá pada ti, podque yo no tedmino de ubicadme.
—Pues yo creo que si no fuera por ti, en vez de renegando todo el día estaría cazando moscas.
—Huzto lo contadio que yo. Ede Se A no ze ve casando mozcaz. 
—Tampoco me veo yo casando personas.
—¿Mendugo?
—¿Qué?
—Que hoy te deho que quedez pod ensima. Hoy el aseite edez tú.
—Alabado sea Dios.
—Pod ziempe. Uy, peddón. Di algo, code; que ze acaba el pozt. Vez, z’acabao.





Imagen bajada de  welt.de

martes, 27 de diciembre de 2011

¿La hora de comer?

—¿A qué hoda ze come en ezta caza?
—Ya lo sabes, a las dos y media los fines de semana, y los laborables cuando llega la Jeru —le contesté a Erre C. A. y se me abrió la boca.
—Poz qué dollo, podque tengo hambe. ¿Y qué hay hoy de comé?
—Lasaña.
—Ummmmmmm. ¡Qué dica! ¿Y a qué hoda disez que comemoz?
—Voy a poner una agenda en la puerta de la nevera y vais a apuntar todos a qué hora queréis comer. Os vendría mejor, pero la comida perdería todo lo que tiene que no es alimentarse.
—¿Ez que zidve pada algo máz?
—A lo mejor para ti no, pero para mí sí.
—Como cualo.
—Mira, si te tengo que explicar eso, apaga y vámonos.
—¡Qué disez! —exclamó Erre C. A. asustado—. Ensiende y comemoz ya.
—Es una frase hecha —le aclaré yo bostezando—. Si no entiendes que comer en familia, el grupo más íntimo de las personas, no solo sirve para llenar la panza, es que no conoces al ser humano.
—Ez que laz danaz no noz zolemoz zentad a shadlad a la hoda de comé podque tenemoz que casad con la lengua.
—Pero ya llevas con nosotros una miaja de tiempo como para haber observado y sacado alguna conclusión, ¿no?
—Ya, pedo ez que cuando Ede Se A come, uza loz sinco zentidoz.
—Yo diría que pones seis, pero bueno. Por eso me gustas cuando comemos, porque parece que no estás, tan calladito y entretenido.
—Oveha que bala, piedde bocado. Zobe todo cuando poned la paella en medio de la meza y la compadtimoz.
—Cuando hago paella echo arroz para tres más.
—Poz ezoz tez nunca vienen.
—No lo hago por esos tres que dices, lo hago por ti, porque si no, los demás no catábamos el arroz.
—¿Y qué hoda ez? —volvió a preguntar el rano mientras se pasaba la mano por la tripa y yo seguía con los bostezos.
El miedoso desvelado y hambriento
—Mira, Erre C. A., entiendo que tengas pesadillas, que me despiertes a las tres de la madrugada, que nos sentemos aquí en el salón hasta que se te pasa el miedo y el malestar. Que te apropies de mi sillón. Pero que a estas horas me preguntes si falta mucho para comer, no te lo aguanto más veces. Como lo vuelvas a preguntar te quedas solo porque yo me voy a la piltra y tú a tu cama. Haya lo que haya en tu habitación.
—No podfa, que en el rincón de la ventana hay una adaña máz gande que un todo.
—Buena frase esa de más grande que un todo. Pero coges la manta roja y le das unos capotazos al toro, y así no me toreas a mí. 
—Mida, Mendugo, eztá amanesiendo. El zol noz da loz buenoz díaz.
—Será a ti, yo no estoy tan seguro de que vaya a ser bueno tal y como empieza.
—Pedo ez un día, ¿no?
—Sí, y podría servir para algo. Por ejemplo para salir a coger ranas.
—Eztá pohibido, ze ziente. 
—¡Qué lástima!, porque yo no tendría que salir de casa.
—¿Me pedmitez una zuhedensia?
—Sí, pero no preguntes a qué hora comemos.
—No, pero… ¿Dezayunamoz lazaña?
—No. Yo me voy a dormir.
—Poz vaz a peddé la mañana.
—Prefiero perder la mañana que la paciencia.
—No te peocupez, yo te la buzco. Aunque te paza lo mizmo cuando alguno llega tadde a comé.
—Si no avisa sí, me parece una falta de respeto para quien se lo curra en la cocina y en la compra y en pensar algo diferente de comida cada día, en poner la mesa, etcétera, etcétera. Y más cuando está consensuada la hora. ¿O es que no es rígido para el cocinero hacer la comida a diario, y la compra y etcétera, etcétera?
—Zí, la veddá, que eztén pendiente de ti tiene zuz ventahaz, pedo también tiene zuz inconvenientez.
—¿Cuálo?, como dices tú.
—Que tenemoz c’aguantadte.






Imagen bajada de  skyscrapercity.com

lunes, 26 de diciembre de 2011

Simplemente

—¿Qué tal pod Cuenca?
—Bien, como siempre. Mucho viento al volver.
—¿Buenoz o maloz?
—Ni buenos, ni malos, simplemente muchos.
—¿Y ya eztá? ¿Ezo ez todo? —se extrañó Erre C. A.
—Vamos a ver, cuando vas a estar con un amigo, lo importante es eso, estar con él, simplemente.
—Poz qué abudimiento.
—Oye guapo, mi vida la vivo yo.
—Pedo la zufo yo.
—¡Qué vas a sufrir tú! ¿Y qué pasa, que para pasarlo bien hay que liarse a beber y a comer como en una bacanal romana? —me quejé—. Simplemente no entiendo yo así la diversión.
—No, ni azí, ni azao. Tú no entiendez el divedtimiento en henedal.
—Además, mi intención no era divertirme, simplemente.
—¡Ho, tío! ¡Qué dado edez!
—No. Simplemente intento tener mis cosas claras. Con solo dar un abrazo a mi amigo y volverme, hubiera tenido bastante.
—Vamoz, la vizita del méquido.
—Pues menos mal que no te llevé... Que lo pensé. Tú te hubieras quedado mes y medio a pegar mangas.
—Impozible, yo no uzo mangaz, ni con velco ni veddez. ¿Y cómo cosina Deme?
Simplemente muy bien.
—Entonsez me hubieda quedao pegao tez mezez.
—Sí, pero ahora tiene un gato. Le llama Frodo.
—A mí me caen bien loz hobbitz.
—Es un gato, simplemente. No es un ser antropomorfo, ni le acompaña mago alguno, ni la cohorte de héroes que al hobbit que te refieres. Lo que no te iba a gustar, además, es que mi amigo es policía.
—¿Y qué? Ede Se A ya tiene todoz zuz papelez en degla.
—No, Erre C. A., no. Si uno pone simplemente sus papeles debajo de un cartabón no quiere decir que los tenga en regla. Simplemente están debajo de una regla —puntualicé con cierto retintín.
—Una coza, Mendugo.
—¿Qué?
Zimplemente no te aguanto. No hay colega máz loco qu’el que quiede vivid zólo la dealidá. Ah, y métete la palabeha eza pod donde te quepa.
—¿Cuál, antropomorfo?
—No, zimplemente pienza un poquito que, apadte de pezao, también padesez tonto.

Continuará



domingo, 25 de diciembre de 2011

Llegó la Navidad

—¿Qué vamoz a sená en Noshebuena?
—Pues no lo sé —contesté a Erre C. A.
—No queda nada.
—Si no queda nada, no cenamos.
—Me defiedo a que no queda nada pada que llegue.
—¡Ah! —seguí haciéndome el despistado.
—¿Y?
—Sabes que no cocino nada especial.
—Ezo ya lo zé. Edez de cosina vulgá y codiente tidando a apañá y pezeteda. Pedo eztoz díaz te podíaz eztidá un poco, ¿no?
—No me he estirado en cincuenta y pico años, me voy a estirar ahora…
—Zí, edez de la Cofadía d’enanoz del puño sedao. Pedo, ¿y zi hasemoz un pavito delleno?
—Puedes hacer un pavo, a ti te sobran.
—Y noz veztimoz y to —prosiguió el rano a lo suyo.
—Te recuerdo que gracias a dios, tú no usas ropa y yo me visto todos los días.
—Una codbatita o una pahadita… —sugirió el pesado.
—Sí, me estás convenciendo —ironicé.
—¡Ay, hiho! ¡Qué zozo edez! No zé cómo te aguanta tu shica.
—Que no te metas en eso, pesado.
—Zi ez que edez un muedmo.
—Entiendo que haya gente que celebre, pero yo no tengo motivos. Y gastar por gastar no me parece bien. Como a ti no te duele el bolsillo —le reproché a Erre C. A.
—Podque Ede Se A no tiene bolzilloz.
—Yo sí, pero vacios.
—¿Zi conzigo dinedete senamoz a lo gande?
—No. Si consigues dinero le rezo una novena a San Antón.
—¿No me vez capás?
—Con continuidad, no. Qué quieres que te diga.
—Hombe de poca fe.
—Rano de poca voluntad.
—Compadáz pod lo menoz masapán y tudón…
—No. No me gustan.
—Y a loz demáz que noz padta un dayo.
—No, eso tampoco me gusta.
—Poz me veo el día teinta y uno comiéndome dose muñonez, aunque no loz tenga.
—Las uvas de la suerte son peor que la Lotería, pero más baratas.
—¿Y la aleguía de compadtí, qué?
—Que invierto tu frase: compartir la alegría.
—Clado, como no te cuezta.
—A veces, cuesta mucho, no te creas.
—Poz voy a ahodá pada compadte un mogollón d’aleguía.
—Ya me la das, no hace falta que te gastes nada.
—Vaya, menoz mal. Pedo, ¿dónde t’haz dehao tú el ezpíditu navideño?
—Eso es un subterfugio para hablar de las compras a tuti pleni. De tanto decirlo nos han confundido.
—La hente, bueno, alguna hente nesezita divedtidse.
—Lo que necesita la gente es dinero para subsistir.
—No zólo de pan vive el hombe.
—Pero es lo básico, si no, que se lo digan a un rano que conozco.
—Entonsez, ¿qué?, ¿senamoz madizco?
—Pero si a ti no te gusta lo que sale del mar.
—¿Y qué? Un día ez un día.
—Y siete una semana.
Habría que oírlos
—Tienez dasón, pedo zanta. Una zemana zanta padese ezto. Venga, aleguía a daudalez, venga villansicoz, venga zambombaz y pandedetaz… ¡Made mía! P’habednoz matao. Voy a hablá con eze tidadudoz de Papá Noel que ha puezto tu shica en la tedasa, a ved zi m’alega el oído. Ahí te quedaz, cazcabel.









Imagen bajada de  frasesdeshechas.blogspot.com

sábado, 24 de diciembre de 2011

Consejos vendo y para mí no tengo


Siempre he querido verme triunfador. De hecho, en su momento, hice una lista. ¿Triunfador como éste? ¿Triunfador como aquél? E iba descartando  modelos. Me quedé sin ninguno. Reparé entonces que ése era el asunto: el modelo. Todos los actuales me hacían comulgar con ruedas de molino. No me bastaba con tener un sueño. Tenía que pulirlo. Lo mío no era normal, me decía. Por otro lado, lo veía lógico: triunfar como yo quería, no entraba dentro del catálogo al uso. Hoy sé que no hago nada especialmente bien. Ni lo del principio, ni lo del final me quita el sueño. Por eso hablo con Erre C .A. Estoy a su nivel. Intento reconstruir una vida que no se ha ido al garete. Intento sentirme protagonista de mi propia existencia: escribir, mal, bien o regular, expresando lo que siento. Sin deberle nada a nadie que no sea un banco. Y sin rendirle pleitesía ni a famas ni a dueños. Ni por méritos ni por deméritos me llegará la hora de arrepentirme. Sea yo ese hombre gris que desea soñar en una realidad donde esté prohibida la misma; donde cualquier loco sea admirado y no encerrado; donde la suerte sonría a quien no compre loterías. Donde un niño me haga pensar que el infierno puede esperar; donde las alegrías perduren y no sean moneda de cambio; donde mi compañera y yo podamos convivir sin que la rutina se interponga; donde la globalización económica se emborrache de individualismos; donde alguien intente un socialismo que respete más a la individua que al individuo; donde las “gracias” se despilfarren en boca de cualquiera; donde la fama no sirva para comer; donde los maestros sean admirados; donde cuestionar no te reste un punto; donde los modelos no sean envidiados y donde soñar con la fama te haga feliz.

viernes, 23 de diciembre de 2011

Palabras con vocación impropia (61ª)

Sexagésima primera entrega. Verbos.

.............................................................. 
Que los agachapaditos no saben
agachaparse. (Del ár. hisp. Azzabbú´g). prnl. Cuba. agazaparse.
agachaparse. (De agachar y chapa, tapón de botella). prnl. Agacharse hasta tomar la altura de una chapa.
ej.: Se agachapó tanto que desapareció.
…………………………………………………
agermanarse. prnl. Entrar a formar parte de una germanía.
agermanarse. (De Germānus). prnl. Dicho de una persona: tomar los modales y las costumbres alemanas.
ej.: La beca Erasmus en Berlín de mi hermano sólo le ha servido para agermanarse.
..............................................................
alzaprimar. tr. Levantar algo con la alzaprima (|| palanca).
alzaprimar. (De alzar y prima). tr. Subir la prima de riesgo de un país.
ej.: Alzaprimando que estamos.
..............................................................
amañar(De maña). tr. Preparar o disponer algo con engaño o artificio. […].
amañarse. (De maño, aragonés). prnl. Dicho de una persona: tomar los modales y las costumbres de los aragoneses.
ej.: Durante mi estancia en Teruel me amañé mucho.
..............................................................
amputar. (Del lat. amputāre). tr. Cortar y separar enteramente del cuerpo un miembro o una porción de él. U. t. en sent. fig.
amputar. (De an- y puta). tr. Arrancar o cortar de cuajo la compraventra de sexo de las calles.
ej.: En Madrid, han conseguido amputar la Casa de campo.
..............................................................
amular. (De mula).  intr. desus. Dicho de una mujer: Ser estéril. […]
amular. (De mula). prnl. Dicho de una persona: tomar los modales y las costumbres de las mulas.
ej.: Sin formación el hombre se amula.
.............................................................
Y ¡zas!, se amuró
amurar. tr. Mar. Llevar a donde corresponde, a barlovento, los puños de las velas que admiten esta maniobra, y sujetarlos con la amura para que las velas queden bien orientadas cuando se ha de navegar de bolina.
amurar. (De muro). prnl1Dicho de una persona: tomar los modales y las costumbres de las paredes. ||  2Darse contra un muro o una pared.
ej.: Mi padre se amuraba muchas veces.
..............................................................
anear. tr. Medir por anas.
anear. (De Ana). tr. Engendrar niñas que se llamarán Ana.
ej.: La bisabuela materna de la Virgen María aneó una vez.
..............................................................
angelizar. (De Ángel). tr. p. us. Comunicar la virtud angélica.
angelizar. (De Ángel). tr. Cambiarse el nombre por el de Ángel.
ej.: No sé si Ángel Nieto se angelizó a fue así bautizado.
..............................................................
angustiar. (Del lat. angustiāre). tr. Causar angustia, afligir, acongojar. U. t. c. prnl.
angustiar. (De Angustias, nombre propio). tr. Bautizar a una hija con el nombre de Angustias, que ya es mala leche.
ej.: En Ayamonte angustian mucho.
..............................................................xD


Imagen bajada de  (1ª) www.picasaweb.google.com y www.cervezasdelmundo.com, (2ª) www.juangavasa.blogia.com

jueves, 22 de diciembre de 2011

El sastrecillo valiente


—Como te vea mi chica enredando con eso, vas a saber lo que es trabajar en galeras.
—Vivez en la inopia, Mendugo.
—Y tú en Babia. Como si no os conociera a los dos….
—Ez ella la que ha inziztido.
—Ya me extraña...
El aprendiz de sastre
—Le he disho que cozía unaz cozaz muy bonitaz y m’ha poponido enzeñadme.
—Ahora me lo explico... Pero tú por dar coba…
—Ez veddá, ¿o no eztá to el día con la coztura?
—Y con lo que no es la costura. ¿Pero tú para qué quieres aprender a coser a máquina?
—Nunca ze zabe. Cuando tú te muedaz a Ede Se A no le va a quedá nada. Y a lo mehó me tengo que ganad la vida...
—De sastre…
—Yo no zoy un dezazte.
—Ni yo me voy a morir, no te jo…
—¡Eh! Quieta padá eza boca.
—¿Y no dices que las ranas vivís poco?
—Ez veddá, pedo yo zoy hoven, no como tú, que te quedan doz bodaz y tu funedal.
—Pues ya ves mi madre…
—Pedo ella no fuma y ez muhé.
—Sí. Y volviendo al tema, sí que lo llevas claro. Entre lo que pienso de las herencias y demostrar que llevas sangre mía, te va a ser difícil apañar algo.
—¿Entendez ahoda podqué me tengo que fodmad y labadme un futudo? 
—Sí, sí que te entiendo.
—Poz no me diztaigaz que tengo qu’enzayá el pezpunte doble en sig sag.
—Vale, Vitorio.
—¿Qué m’haz llamao?
—No te he insultado. Vitorio y Luquino son unos modistas famosetes.
—Poz en todo cazo yo zedía Luquino.
—Sí, lu qui no hagas tú…
—Qué gasioso, el Mendugo. ¡Ay! Vez, ya m’he pinshao. Pod tu culpa.
—Pero si eres de trapo…
—Y tú de piedra.







Imagen bajada de  www.depuntadasehilos.blogspot.com

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Lo tercero


Para Susana
El guiño del rano













—¿Sabes, Erre C. A.?, a veces me gustaría ser dios.
—Poz a vesez astuaz como zi lo fuedaz.
—No. Va en serio.
—Anda que yo hablo en boma…
—Y no me guiñes el ojo, me pones nervioso.
—No te lo guiño a ti ¿Pedo qué hadíaz ziendo dioz, zi ze puede sabé?
—Colocaría a más de uno en su sitio.
—Edez un oddenadó compulzivo, y ademáz tonto. ¡Mida que quedé sed dioz pada pazadte la vida colocando…! Vete de deponedó a un Cadefú.
—Contigo de amigo, no necesito más comprensión que la del resto del mundo.
—Poz el dezto del mundo no veo yo que te haga musho cazo.
—Sí, pero el que me haces tú no me sirve para nada.
—Vaya que no. Zoy el catalisadod de tuz tontedíaz.
—¿O sea, que percibir la injusticia y querer inmiscuirse en ella es una tontería?
—No. Lo que ez una tontedía ez penzá que ibaz a adeglá algo. Vive y deha viví, tío.
—No es lo mismo que te pisen a ti que te pisen un hijo.
—¿Y tú dónde tienez loz hihoz pada que te loz pizen, donde loz calloz?
—Los tengo donde todos los padres, viviendo su vida por ahí.
—Loz zustoz fodman padte de eza vida que disez tú. No loz puedez eztidpad zin tocad el dezto. La siduhía ez muy agueziva.
—Y la impotencia también.
—Al final el tiempo pone a cada uno en zu zitio.
—Ya, pero entre que eso es una frase hecha y el precio que hay que pagar, a uno le entran las prisas.
—Como a mí.
—¿A ti qué prisas te aprietan?
—Laz de comé.
—¡Jope, tío! Eres de piñón fijo.
—No. Ede Se A ez conzsiente de zuz limitasionez, que no ez lo mizmo.
—Como por ejemplo no saber cocinar.
—O la de zabé que con eztá ya ez baztante para ti, podque el dezto ya lo ponez tú.
—Estar, estar… Saber que los demás saben que estás… ¿Será suficiente?
—A vesez zí, a vesez no. Mida dioz, con eztá tiene zufisiente.
—Pero ése está en todas partes, según dicen.
—Ez la zenzasión que tengo yo contigo. No me ziento zolo ni en el baño.
—¿Tan absorbente soy?
—Y máz.
—Pues yo siempre me planteo estar al margen, no estorbar, salvo cuando me entra la neura, como hoy.
—Zi eztád al madhen ez hasedme desí y hasé lo que tú quiedez, que venga dioz y lo vea.
—Pero lo nuestro es una relación de personaje y autor.
—Y petendedáz que me lo quea, ¿no?
—O eso, o estoy loco.
—Yo queo que lo tedsedo.





Imagen bajada de  emoticonesgratis.com.es